El periodista Entrambasaguas, amigo de Murillo, enfrenta juicio por acoso a menores en España
El español Alejandro Entrambasaguas fue denunciado por acosar en 2019 a los hijos de la ministra de Igualdad de España, Irene Montero y el exvicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias. Ahora enfrenta un juicio por el que la Fiscalía pide un año de cárcel.
Entrambasaguas fue un aliado del régimen de Jeanine Añez y fungió como “pseudoperiodista mercenario”, según el sitio web del analista Gabriel Villalba.
El 7 de junio de 2021, el abogado Manolo Rojas denunció que existen indicios de que el exministro Arturo Murillo financió a Alejandro Entrambasaguas durante el régimen de Añez, informó entonces ATB.
El 9 de febrero, el Juzgado de lo Penal número 30 de Madrid realizó el juicio contra el redactor de OK Diario, Alejandro Entrambasaguas por presuntamente acosar a los dos menores en noviembre y diciembre de 2019.
La ministra española espera que el proceso en contra de Entrambasaguas avance y confía en que se haga justicia por acosar a los menores e incluso a su niñera.
“Estamos aquí como madre y como padre, como haría cualquier familia para proteger a sus hijos (…) contra los hijos no todo se vale, así que confiamos en la justicia y que se haga justicia para proteger a nuestros hijos contra el acoso”, señaló Montero en declaraciones difundidas por Bolivia TV.
Iglesias y Montero enfatizaron que su presencia en el juzgado es como padres y no por ser figuras públicas. Aseveraron que recurrieron a estas instancias para proteger a sus hijos.
La defensa de Montero e Iglesias piden a la justicia dos años de prisión para Entrambasaguas, además de una indemnización de 10.000 euros por el delito de acoso a personas en situación de vulnerabilidad por razón de su edad.
Según la Fiscalía, el periodista cometió en noviembre y diciembre de 2019 un delito de acoso sobre dos niños de 17 meses y su cuidadora, por el que le solicita un año de cárcel y que no se acerque a menos de 500 metros de los menores durante dos años.
Se denunció que Entrambasaguas llamó reiteradamente a la cuidadora de los pequeños, cuyo teléfono móvil consiguió a través de los vecinos y también llamó de forma insistente al teléfono de la vivienda. Además, que el reportero entró en las zonas comunes de la urbanización en las que a veces estaban los pequeños.