Arce augura el fin de la globalización y el auge de las economías desarrolladas como la de Bolivia
El Presidente expresó que la política monetaria y fiscal debe tener cada vez más un contenido social “que un simple contenido tecnócrata o de manual de libro de economía”, porque el mundo se enfrenta a tiempos de cambio.

El presidente Luis Arce Catacora, reconocido como artífice de las políticas económicas en el país desde que fue ministro de Economía y Finanzas hace más de 16 años, afirmó este jueves que tres hechos fundamentales auguran el fin de la globalización en el mundo y el auge de las economías desarrollas con contenido social, como la de Bolivia.
“Está en cuestionamiento desde hace mucho tiempo el planteamiento del neoliberalismo sobre la globalización, que en su momento estuvo de moda inclusive en la enseñanza de nuestras propias universidades; sin embargo, desde el gobierno de (Donald) Trump en EEUU se evidencia el cuestionamiento a estas políticas y estamos entrando en una etapa del neoproteccionismo de las economías desarrolladas y de las más débiles (…), que han abandonado los principios de la globalización”, argumentó.
El Jefe de Estado, durante su participación en la XV Jornada Monetaria: ‘Riesgos Globales en un Contexto de Incertidumbre y Volatilidad Financiera’, en ambientes del Banco Central de Bolivia, esbozó tres elementos fundamentales para formular políticas económicas, debido a que redundan en los problemas y riesgos globales de contexto, en la incertidumbre y estabilidad financiera mundial.
Expuso que en la economía se presentan cambios importantes, uno de ellos muestra la disputa de conformación de nuevos bloques económicos claramente identificados que en la actualidad deben tomarse en cuenta en la formulación de las políticas monetarias fiscales y las políticas económicas en general.
“Por una parte están Estados Unidos y Europa, que se encuentran en una fase muy complicada de su economía, representando al viejo sistema capitalista; y por el otro, el nuevo bloque de los Brics, encabezado por China, Rusia, India, el propio Brasil y otros países, que de a poco empiezan a mostrar su poderío económico que estaba rezagado por años”, subrayó.
Indicó que se debe analizar la decadencia de la globalización, que formó parte del concepto para la adopción de políticas de tipo mercado con el objeto de dirigir el rumbo de las economías del mundo, sin embargo, empezó a evidenciar cuestionamientos provocando el ingreso al neoproteccionismo abandonando los principios de libre comercio y mercado.
Un tercer punto a debatir, a criterio del mandatario, responde a la evaluación de los efectos económicos y sociales de la pandemia del Covid-19 que se generaron a nivel global.
Asimismo, enfatizó que “los síntomas de lo que ocurre en el mundo se expresan en la inflación, que es una enfermedad del sistema capitalista, uno de los males más importantes junto con el desempleo”, además de los efectos de la recesión por la pandemia y, que se profundizan, con la guerra entre Rusia y Ucrania.
En ese contexto, expresó que la política monetaria y fiscal debe tener cada vez más un contenido social “que un simple contenido tecnócrata o de manual de libro de economía”, porque el mundo se enfrenta a tiempos de cambio.
“El Fondo Monetario Internacional (FMI) ahora recomienda subvenciones, cuando las aplicábamos eran fuertemente cuestionas, pero gracias a nuestras subvenciones, a toda la política social que aplicamos en el país tenemos la estabilidad económica muy envidiada por muchos países”, expresó.
Arce insistió que lo que define el éxito de la política económica tiene que ver con el objetivo de lo que se busca, ¿a quién se quiere beneficiar? y ¿cómo se quiere beneficiar?, por lo que el acierto del Modelo Económico Social Comunitario Productivo del Estado Plurinacional incide en que prioriza las necesidades del pueblo boliviano.